Antiguamente en los pueblos, se ponian los nombres de los padrinos, pues a la tía de Antonia no se lo pusieron, pero todo el mundo le llamaba igual que su madrina. Asi que ella empezó a firmar como Filo, como su madrina… y claro, cuando se murió su marido y fue a cobrar la pensión, no le dejaron! Por que se pensaban que le había puesto los cuernos con otra…