Hace unos años estaban en el parque jugando con su hijo, y vieron a un niño con un casco en la cabeza. El niño tenía un problema en la cabeza, y le habían puesto ese casco para solucionarlo… pues no se le ocurrió la genial idea a su marido que decirle a la madre del niño, que dónde lo había comprado, que quería comprarle uno a su hijo… ¡Qué vergüenzaaa!!